Son solo colores.


Un arco iris muy personal.

El arco iris.

Cuando llueve débil y finamente
y el astro Rey colocado al oeste
el arco iris luce brillantemente
si diriges tu mirada hacia el este.

De diversos colores se compone
en una curva compuesta imposible
porque la luz solar se descompone
en el nominado espectro visible.

En el arco exterior se pone el rojo
tan duro como el color de la sangre
o como tu mirada de sonrojo
que logra sentirme tal pura sangre.

El naranja su calor reconforta
tal que tu existencia junto a mi lado.
La promesa futura que me aporta
tenerte próxima o hacía un costado.

El amarillo es el color del Sol
de las finas arenas del desierto
de la preciosa flor del girasol
y del color de tu cabello abierto.

El verde la tonalidad de en medio
nos transmite convicción y esperanza.
Color de la vegetación promedio
y de tu predilección la confianza.

Viene el pigmento cian, celeste o añil.
El color moderno verde azulado
de un carácter jovial y juvenil
que posee tu cuerpo azucarado.

El color azul se muestra el siguiente.
El color típico de nuestros cielos,
del tono de tus ojos en mi mente
que me origina grandiosos desvelos.

El tono violeta llega al final
del arco iris el ribete interior.
Llevas bella tonalidad labial
que hacen de ti un modelo evocador.

Vienen negras nubes que el Astro tapan
borrando el arco iris del firmamento,
la añoranza y la tristeza me atrapan
dejando tu efigie en mi pensamiento.


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