Tambores de guerra

Tiempo ha que no sonaban tambores de guerra en Europa.  Llevamos un par de meses con tensiones en la zona oriental de Europa. La expansión de la alianza atlántica, léase la OTAN o NATO, hacia los montes Urales perturba mucho a la madre Rusia y esta con su presidente Vladimir Putin a la cabeza ha decidido tomar medidas.

Mi nueva tableta


Desde hace meses las tropas de Rusia con todo el material e incluida su armada se han situado en la frontera con Ucrania. La más que probable adhesión de este país a la alianza atlántica ha colmado el vaso de la paciencia rusa. La otrora potente Unión Soviética con su telón de acero estaba muy bien protegida de posibles invasiones de occidente. Desde que cayó el imperio soviético el goteo de las adesionez a la UE y la OTAN de todos estos países es continuo, y la madre Rusia se siente amenazada.

La exigencia de Rusia es que Ucrania no entre en el bloque atlántico pero por otro lado Rusia no es quién para exigir a otro país que haga lo que al país de los zares le guste. Se especula con que Rusia pretende poner a otro presidente más pro ruso que el que ahora ocupa la presidencia del Ucrania. Las tensiones entre Ucrania y Rusia han sido históricas, leed un poco de historia. 

La respuesta de Ucrania ha sido como la de cualquier país que se siente amenazado, denunciarlo y pedir ayuda. La respuesta viene de la OTAN, ya han enviado ayuda logistica y material. Las embajadas echan humo, la vía diplomática a pesar de todo sigue abierta y las llamadas a la cordura no cesan. Lo primero que han hecho las democracias occidentales son embargos económicos no sólo contra Rusia sino contra los ricos rusos y sus bancos. La presión que se ejerce los unos a los otros es enorme. El precio del gas y del petróleo han subido y se espera que siga así los próximos meses.

En este escenario pre bélico se han sumado nuevas incógnitas a la vieja ecuación. Una de ellas es la desinformación o las fake news, cada cuál cuenta una historia de su enemigo. La otra es la batalla cibernetica que se puede desarrollar en la Red. Los escenarios de enfrentamiento son múltiples, vivimos en un mundo muy complejo.

El personal de las embajadas de occidente y de Rusia están abandonando el país precipitadamente, el asunto pinta pero que muy mal. Quiero recordar que las guerras mundiales empezaron en su día por incidentes aislados y sin importancia a los que se sumaron aliados hasta organizar la que se organizó. Debemos tener cuidado con estos asuntos, no son baladí. 

Ahora llega la cuestión, si Rusia ataca ¿occidente responde? ¿Nos metemos en una guerra global con las consecuencias más evidentes que nos lleva ello? ¿Ya estamos preparado para todo esto?  No es ninguna tonteria lo que escribo, hoy en día una guerra global seria una auténtica catástrofe para la humanidad.

Este es el ensayo más crítico que hago, pero hay que contar los miedos que uno tiene. He vivido una crisis económica, una pandemia, espero no tener que vivir una guerra, hoy en día las distancias ya no existen. Creí hace tiempo que no viviría todo esto, creo que fui demasiado ingenuo.

Escribo esta entrada desde mi nunueva tableta. La verdad que me he sentido cómodo con ella, es cuestión encontrar el punto de comodidad a la hora de escribir. La experiencia ha sido muy buena, repetiré.

Sin más que contar me despido de todos. Hasta la siguiente entrada, un saludo a todos.

Bilbao, 23 de febrero del 2022.

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