En evidencia

Desde que tuvimos la crisis económica del 2008 no hacen más que sacarnos los colores, o ponernos en evidencia, todos los hechos que van ocurriendo desde entonces o desde incluso mas lejos en el tiempo hasta ahora. La crisis del 2008 puso en evidencia la dependencia o conexión que existe entre la economía real y la economía financiera. Mi modesta opinión es que no debería de ser así, pero esa crisis puso en evidencia nuestro mal sistema económico. La economía real nunca debe estar supeditada a lo que ocurre en la economía virtual, léase inversiones en bolsa o similares. Dije en estas líneas hace tiempo que cada uno pague su factura, yo no me tengo que verme afectado porque la bolsa sube o baje, y ya van varias veces. Me parece genial que cada cuál invierta su dinero en lo que más desee, ahora se han puesto de moda las monedas virtuales, veremos, pero tengo claro que cada palo aguante su vela. Que nadie venga llorando después.

Grandes nubarrones se ven en el horizonte

Después de que nuestros políticos dejaran que el sistema económico siguiera igual, y que el ciudadano se comiera con patatas, o sin ellas, la pertinente crisis y casi sin recuperarnos, o sin el casi, nos llega la pandemia de la Covid-19. Una enfermedad para la que no estamos preparados y para la que tuvimos que hacer grandes esfuerzos para que no empeorase o se expandiese más de la cuenta. Esta pandemia dejo en evidencia nuestro sistema sanitario con todas las carencias habidas y por haber, saltó todo por las costuras. El trabajo de médicos y enfermeros ha sido titánico renunciando a días de vacaciones, metiendo más horas de las que debían, aguantando lo inaguantable por parte de todos. Hubo personal sanitario que incluso salió de su jubilación para poder ayudar. Tiempo después estos profesionales de la sanidad han hecho días de huelga y protestas en la calle, manifestaciones, para denunciar las limitaciones de nuestro sistema sanitario que tenemos, por el momento no se les hace caso, veremos.

Ahora, y todavía con la pandemia a cuestas nos vienen tambores de guerra desde la Madre Rusia. Resulta que su presidente, un tal Vladimir Putin que resulta ser un dictador de manual del siglo XX, se siente agobiado porque nota el aliento en la nuca de la OTAN y ha decidido emprenderla a bofetadas contra Ucrania. A fecha de hoy siguen los combates y las atrocidades, pero esta entrada no va de esta guerra. Parece ser que esta guerra a sacado los colores a Europa, léase la UE, y nos hemos enterado de dónde o desde dónde viene todo. Me refiero a nuestros bienes y supuesto estado del bienestar.

Nos hemos dado cuenta con todo este lio que nuestra dependencia energética con el exterior es brutal. Alemania y toda su zona de influencia le compra casi todo el petroleo y el gas a Rusia. Sí, es así, como lo estáis leyendo. Por si les fuera poco tener un gaseoducto que va desde Alemania hasta Rusia resulta que estaban construyendo otro que pasa por Ucrania. No quieres una taza Ben, pues vas a tener dos. Ahora se lo están pensando. Casi el cincuenta por ciento de los cereales que consumimos vienen del granero de Ucrania, ahora nos enteramos que no producimos nuestro propio aceite de girasol, que viene importado. El pan y los pasteles que tan contentos consumimos vienen de dónde vienen, por lo menos la materia prima.

Estas circunstancias y alguna más que seria largo de escribir ha producido que los precios del carburante se hayan disparado afectándonos a todos, a lo que hay que sumar el precio de los cereales que tiene su influencia en el sector primario, ganadería y agricultura. En el global todo esto produce una bola que hace aumentar los precios de todo disparando la inflación que ha subido un 10% desde que comenzó la guerra, y vamos que si lo noto en el bolsillo. Hemos tenidos paros en el transporte, protestas del sector primario, y que muchos se vean abocados a cerrar sus negocios sean los que sean. El panorama no pinta nada bien.

Ahora se vislumbra otro problema en el horizonte y es que China está mirando con ojitos tiernos a Rusia, y las preocupaciones empiezan a ser plausibles. El gigante Chino es uno de los principales productores de alta tecnología del mundo, mirad la marca de vuestros aparatos electrónicos, y las relaciones se están empezando a tensar. Veremos.

Por el momento no os voy a contar más, haré varias entradas de estos temas de actualidad. Un saludo a todos y hasta la siguiente.

Bilbao, 4 de marzo del 2022.

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