Regresando a lo vintage

En esta época de lo políticamente correcto por lo visto no es adecuado hablar de lo viejo o de lo obsoleto, se utiliza más el termino vintage. Por lo visto es un termino que viste más y disimula más para decir lo mismo, viejo o pasado de moda, ¿o quizás no? Hemos pasado unos años de auténtica locura de lo último de lo último a todos los niveles y en el segmento de la tecnología ni os lo cuento. Todo hoy en día se apoya en la tecnología como si esta fuese a durar eternamente o como si no estuviese exenta de errores. Pues han sucedido una serie de problemas que nos están haciendo plantear esa vuelta a viejas tecnologías o no tan viejas para que no perdamos el contacto o para que nuestros trabajos no se pierdan en una hecatombe tecnológica.

Linterna con radio-transistor

La caída de servidores de servicios de mensajería vía teléfono móvil supone un grandísimo quebranto en nuestro día a día, son noticia de telediario. No quiero ni pensar si algún servicio de correo electrónico cae, sería un auténtico fin del mundo. Por no hablar de la caída de Internet, colapsaría la economía mundial ya que todas las transacciones económicas se hacen vía internet, todas. Se debería de volver a las clásicas llamadas de teléfono personal para mantener el contacto con toda nuestra gente y no agobiarnos cuando algo se desconecta. Por no hablar de que todo lo que hacemos vía Internet está en manos de pocas empresas, Google, Facebook, Amazon y poco más. Si alguna de estas empresas colapsa, como se dice ahora, se perdería todo lo que hemos hechos en los últimos veinte años. La verdad es algo que me preocupa. La solución seria diversificar más la oferta y que unos pocos no tengan el control de todo. Ahora Elon Musk ha comprado Twitter, otro que va acaparando mercado. No me gusta esto y lo que puede estar por venir, no.

A nivel personal estoy volviendo a lo vintage. Imprimo mis novelas, ensayos, poemas en papel para luego encuadernarlos y archivarlos. Aparte de tenerlos archivados en mi computadora es bueno tener una copia en papel no sea que algún día se pierda o se averíe el ordenador. No solo tengo música en YouTube o plataformas afines también tengo dvds, vinilos y demás para poder escuchar música. A parte tengo previsto comprarme un buen gira-discos o tocadiscos para usar los vinilos y un buen equipo de música con buenos altavoces para poner los cds con mis cantantes favoritos, no todo pueden ser auriculares y teléfono móvil. Creo que comprarlos por separado estará bien. Parece una tontería pero guardo los transistores de mi padre y linternas que funcionan a pilas, a la antigua usanza no sea que se vaya la electricidad y nos quedemos a oscuras, como para poner velas.

He empezado una especie de cura de desintoxicación tecnológica para no apoyarme solo en una sola cosa y apoyarme más en varias. Como dice el axioma económico, no pongas todos los huevos en la misma cesta porque si se rompe la cesta se rompen todos los huevos. No tiro un solo libro ni una sola página de nada y exagerando mucho, o quizás no, tengo cuadernos, lapiceros y bolígrafos por si llega el fin del mundo, uno ha de estar preparado.

Bueno, creo que esto es todo por hoy. Un saludo a todos y si llega el apocalipsis, buena suerte.

Bilbao, 2 de noviembre del 2022.