Sobre gustos no hay nada escrito.

Por primera vez desde que conozco este día , el día de Todos los Santos, no hemos ido a honrar a nuestros muertos. Causas de fuerza mayor han hecho que nos quedemos en casa, no es nada grave, pero los años pasan y se nota cada vez más sobre todo con mis mayores. En fin, lo dejaremos para el año venidero. Pasando de tema, esta entrada la voy a dedicar a mis gustos personales. No viene del todo mal que me conozcáis algo mejor y saquéis vuestras propias conclusiones.

Búho rojo de Madagascar.

Alguna vez me han preguntado sobre mi animal favorito, pues es el búho. Búho es el nombre común de aves de la familia Strigidae, del orden de los estrigiformes o aves rapaces nocturnas. Habitualmente designa especies que, a diferencia de las lechuzas, tienen plumas alzadas que parecen orejas (sus verdaderas orejas se encuentran al costado de la cabeza, a los laterales de los ojos) y presentan una coloración amarilla o naranja en el iris. Debido a que sus ojos carecen de movilidad y solo pueden ver hacia delante, pueden girar la cabeza 270°. Existen más de 200 clases de búhos. Estas aves habitan en casi todos los lugares del planeta, excepto en la Antártida. Son aves de rapiña, porque se alimentan de seres vivos tales como: peces, insectos, ratones, lagartijas y otros animales. Estas aves son nocturnas, y pueden cazar en la oscuridad. Tienen mucho cuidado al intentar agarrar su presa, no hacen ni el más mínimo ruido y así la atacan. Por ser aves nocturnas tienen muy desarrollada su parte visual y auditiva. El tamaño varía según la especie, el más pequeño es el mochuelo que mide 13,5 cm.

Personalmente el búho siempre me ha inspirado confianza, fortaleza, sagacidad, firmeza. Se quedan quietos y vigilantes girando la cabeza 270 grados a izquierda y a derecha con esos enormes ojos que le confieren una gran seriedad en su mirada. Son carnívoros, y cuando emprenden el vuelo lo hacen majestuosamente abriendo sus grandes alas planeando en silencio. Según las mitologías europeas son considerados como el animal de la sabiduría.

Si queréis saber cuál es el mamífero que más me apasiona es el cachalote, Physeter macrocephalus. Es el animal con dientes más grande que existe; los machos pueden crecer hasta 20,5 metros de largo y llegar a pesar más de 50 toneladas. La cabeza mide un tercio de la longitud total del animal y poseen el cerebro más grande entre los animales existentes. La especie se alimenta de calamares y peces, sumergiéndose en su búsqueda a profundidades de hasta tres kilómetros, convirtiéndose en el mamífero marino que se zambulle a mayor profundidad. Su dieta a base de calamares incluye a las especies más grandes: el calamar gigante y el calamar colosal. Es el depredador viviente más grande y posiblemente el mayor que haya existido, no por el hecho de alimentarse de otros animales (lo cual también es cierto en todos los cetáceos, incluyendo las grandes ballenas), sino por realizar depredación activa sobre animales autónomos. El chasquido producido por el cachalote es el sonido más intenso producido por animal alguno, pero su función se desconoce (aunque se cree que lo usa como sonar y como un medio para aturdir a sus presas). Este cetáceo vive en grupos en los cuales las hembras y sus crías están separados de los machos más viejos que vagan solitarios; las hembras cooperan entre sí para proteger y alimentar a sus retoños. Dan a luz de cada tres a seis años una sola cría y su cuidado se prolonga por más de una década. Son animales muy longevos pudiendo alcanzar fácilmente los setenta años. Ahí queda eso.

La Mantis Religiosa.

Ahora voy con los insectos, ¿adivináis cuál es? ¿La mariposa monarca? No. ¿La cucaracha? No. ¿La tarántula? No. ¿La abeja melífera o la avispa? No. redoble de tambores, ¡señoras y señores! Con ustedes, les presento, aquí está ¡la Mantis Religiosa! ¿Sorprendidos? Es un animal que me fascina, se trata de un insecto carnívoro que ataca a sus presas y se las acaba comiendo. Permanece agazapado en una postura donde sus patas delanteras permanecen recogidas ante la cabeza lo que le da ese aspecto de Sor Maria, parece que está rezando de ahí su nombre, para luego lanzarse contra su presa con sus patas delanteras. Puede comer hasta pequeños roedores, hace pocos días he visto un video en Tuiter donde atacaba a un camaleón donde lo acababa devorando (https://twitter.com/i/status/1187066368694390785) ¡Es algo bestial!. También me apasiona porque se trata del único insecto que tiene cierto aspecto alienígena, parece de otro planeta. el único inconveniente es que cuando macho y hembra copulan la hembra se acaba comiendo al macho. Creo que las hembras de esta especie se pasan un poco con el sexo oral. Los demás insectos me parecen aburridos.

Tulipanes negros.

Ahora vamos con temas un poco más relajantes. Flores. Aquí me gusta la variedad, como con las mujeres. Puedo empezar con el girasol, Helianthus annuus, que es originaria del Nuevo Continente, cultivada y domesticada por los pueblos de la zona de Centroamérica y Norteamérica. Representa el Sol como no podía ser de otra manera. Tiene múltiples usos, semillas, aceites, para decoración. La siguiente es el tulipán, tulipa, no me conformo con cualquiera como podéis ver. El tulipán negro por su forma y color me apasiona, racista no soy. Para acabar con este pequeño apartado no me olvido de otra flor bastante erótica, la orquídea, Orchidaceae. Conocida desde la antigüedad se le confiere propiedades afrodisíacas, la vainilla que era cultivada por los aztecas se mezclaba junto con el cacao para formar una bebida llamada xocoati. Una bebida digna de gobernantes y guerreros como no podía ser de otra manera.

Bueno, hoy os he hablado un poco más de mi. No solo soy astrónomo, tengo otras cualidades. Por añadir, no soy de perros, ni de gatos, ni de dragones. No me gustan demasiado las mascotas, pienso que los animales deberían de estar en la naturaleza y no encerrarlos en nuestras casa como compañía. Para compañía solo o con alguien, pero no con un animal.

Es todo por hoy. Espero vuestros comentarios como siempre. Hasta la siguiente.